Tinelli es poco macho: Tiene que humillar a Paula Robles (e involucrar a los Solari) para que se hable de el

Ya era suficiente con el inseguro Adrián Suar -que utilizaba a Araceli González para escalar en el rating ante cada lanzamiento de Pol-Ka- pero Marcelo Tinelli amenaza con saltar todos los límites porque no solamente involucra a Liz Solari, hermana del futbolista Santiago Solari, que Tinelli contrató en San Lorenzo de Almagro sino que termina humillando a la madre de algunos de sus hijos, Paula Robles.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Especial para Urgente24). En un país hundido en la peor decadencia de valores y de principios éticos y morales, donde la mentira ha desplazado a la verdad en boca de sus principales figuras públicas, la juventud naufraga con un espantoso déficit en su educación y la corrupción acecha en múltiples niveles, mientras la droga hace estragos en todos los niveles socioeconómicos y la seguridad no existe, los referentes populares son necesarios aunque bien pocos.

Solamente por eso me preocupa lo de Marcelo Tinelli. Porque él debería honrar el privilegio que le conceden millones de argentinos de convertirlo en uno de sus referentes.

Entonces, que Marcelo Tinelli deba recurrir a la promoción de sus desgracias/éxitos sentimentales para promocionar su nueva temporada en la televisión, es un bajón.

Tinelli no lo necesita ni tampoco las otras personas involucradas en su insoportable oportunismo que termina faltándole el respeto a sus 2 hijos más pequeños, cuya madre es Paula Robles.

¿Qué pasará por la cabeza de Tinelli para admitir que se hable de su separación de Paula Robles y de su noviazgo con Liz Solari, en tiempos de retorno a Canal 13?

Para colmo Liz Solari, la hermana de Santiago Solari, el jugador de San Lorenzo de Almagro que él importó cuando quedó libre del Internazionale de Milano…

Nadie se sorprenderá que una persona se separe porque se siente seducida por quien no era su pareja hasta entonces. Pero Tinelli y Grupo Clarín deberían apuntar a dignificar a la sociedad argentina que tanto contribuye con el bienestar financiero de los socios de Ideas del Sur y del multimedios.

Algún medio dice: “La reciente separación de Tinelli-Robles potencia la credibilidad del rumor, que, sea mentira o verdad, difundido en este momento, se convierte, sin lugar a dudad, en la frutilla de la torta de expectativas que la temporada 20 de Showmatch genera”.

¿Cualquier recurso es bueno para sumar rating?

Tinelli lo hizo en 2006, 2007 y 2008, y la respuesta de los televidentes fue dispar. La novedad atrajo al comienzo de cada temporada y fue insostenible hacia el final, provocando la ansiedad y la crisis anímica del ciclotímido animador, quien se decía abandonado por su público.

Parece que esa fórmula tiene alguna adrenalina porque lo volverá a intentar en 2009.

Pero el público de Tinelli admiró y se enamoró de otro Tinelli, menos sofisticado pero más cercano a la gente, rodeado de una barra de amigos (a todos los cuales perdió, la mayoría de ellos ofendidos por su creciente vedettismo).

Si se hiciera una encuesta acerca de cuál Tinelli prefiere su público, el de 2009 o el de 1992 ó 1993, probablemente el propio superstar se llevaría una sorpresa.