Fue traicionada por su consciencia en pleno discurso, en una conferencia brindada el 9 de febrero durante la puesta en marcha Instituto Nacional de Medicina Tropical. «…ahora va a formar parte del Programa de Vacunación Oficial del Estado y por lo tanto va a ser gratuito (el medicamento vacuna contra el VPH), y por lo tanto, vamos con el tiempo a lograr que miles de mujeres pierdan la vida por esto…«.
Fueron exactamente las palabras de Cristina Fernandez de kirchner, Presidente de la Nación Argentina. Incluso se diría que está absolutamente informada sobre los terribles efectos secundarios de la vacuna que llevan a la muerte, cuando señala «…con el tiempo…«.
Los negocios de Cristina Fernandez con el gigante de las vacunas Merck (Gardasil) o la billonaria corporación GlaxoSmithKline (Cervarix), ambos laboratorios con oficinas en Argentina, quedaron al descubierto cuando la mandataria «se pisó», o fue traicionada por su consciencia.
Este increíble documento es parte del discurso oficial, no está trucado y pueden buscar en Internet la versión original (si no la borran luego de esta noticia).
¿La traicionó la conciencia o la inconsciencia?
Estas palabras develan la falta de escrúpulos de Cristina Fernandez al incorporar una vacuna altamente peligrosa y mortal al calendario obligatorio para todas las niñas de 11 años del país, es decir, para el 100 % de las niñas, cuando solo un 0.005 % de las mujeres en Argentina (2000 por año, según la propaganda oficial actual y no 3000 como dijo Cristina) contraen cancer de utero por no haberse realizado el papnicoau ni colcoscopia durante 15 a 20 años, lapso de tiempo mínimo que toma una célula para convertirse en pre-cancerosa.
No existen casos de cuello de útero, o cuello uterino en niñas o jóvenes menores a los 30 años, y en EE.UU. fue prohibida para mujeres y hecha NO OBLIGATORIA EN 49 DE LOS 50 ESTADOS DE EE.UU. pero Cristina insistió en agregar una vacuna que contiene ADN viral modificado, que produce muerte súbita, convulsiones crónicas y parálisis de por vida.
Por otra parte está demostrado que el VPH no produce cáncer de cuello de útero, y que la vacuna contagia VPH, además de producir cáncer de cuello de útero. El cáncer de cuello uterino se produce por inyección de la vacuna Gardasil o Cervarix, o por una deficiencia corregible en el sistema inmunológico, y las vacunas contra el VPH, entre otros daños, destruyen el sistema inmunologico y reproductivo.
La Presidente utilizó palabras claves dictadas por la mafia farmaceutica: «Cancer contagioso», «virus», «3000 muertes», etc.
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Lizzy Daecher
BWN Patagonia
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